El libro Padre Rico Padre Pobre de Robert Kiyosaki, es lectura obligada para todo aquel que quiera dar un cambio en su vida.
Padre Rico Padre Pobre: Ideas sobre el libro
Aquí esbozo algunas ideas sobre el libro.
Imagina que partes des 0 en influencias, en contactos fuertes que te den trabajo, y en este momento, peor, donde hay poco consumo y la venta es dominada por las grandes marcas.
Leí el libro Padre rico, Padre pobre y me digo: ¡Maldita sea! Tendría que haber luchado contra viento y marea para aplicarlo.
Parte de la crisis la tenemos una serie de consumidores que con el boom de la construcción vivimos a tope, aceptando (no en mi caso) hipotecas descomunales.
Recuerdo la anécdota de una señora (Seguro que no se había leído el libro Padre rico, Padre pobre) que me preguntaba,
¿Cómo no te compras una casa más cara?
Sin querer retar ni desafiar a nadie, esta señora, tenía contratos de trabajo precarios y se había metido en una vivienda super carísima, aunque tardara en pagarla 35 años.
Cómo mejorar los ingresos
Es la historia de esa confrontación: el que es moderado en sus gastos, el que sabe como ganar y ahorrar y el que arriesga en el sentido de que todo vale que es como si se tirara desde un precipicio con los ojos cerrados.
Leyendo el libro no significa que te vayas a hacer rico de la noche a la mañana, ni que hayas de tener obsesión por el dinero.
Son simplemente unas reglas para aplicar, y puedas llegar a fin de mes, y no es ninguna clase de demagogia, Padre pobre, que no tiene más remedio y hoy vamos a ser muchos Padres pobres. Otros serán Padres ricos, una minoría.
Ideas y Reflexiones sobre Padre rico Padre Pobre
La carrera de la rata en Padre rico Padre pobre
El error de la crisis fue el claro exponente de que se decía como los inmuebles (las casas) iban a seguir subiendo, pues, para adelante, sin pensar en nuestros ingresos, y echando el pesimismo de nuestra vida.
Es como el propio Kiyosaki comenta, el tema de la carrera de la rata, y yo añado, o como una mula da vueltas a una noria.
O el círculo vicioso, de ganar, gastar, sin ahorrar, sin invertir.
Si todo se gasta no queda nada donde echar mano. Pero no critico, válgame Dios.
En la carrera de la rata hemos caído todos, o casi todos, hemos sido Padre pobre una vez y Padre rico, otra.
Y claro, claro que nos estrellamos.
Siguiendo el argumento del libro, todo cambia, porque parte de unos principios que a simple vista parecen chocantes. No siempre los negocios estratégicos están libres de riesgos.
Que digan que tu vivienda es un pasivo, te hartas de reir
Si contablemente la adquisición de un inmueble para la labor profesional, como haciendo un símil, la casa para vivir, es un Activo, pues resulta chocante.
Y ¿porqué resulta chocante?, muy fácil:
Sintetizando al máximo: El Activo que crea valor, El Pasivo paga
Sintetizando al máximo: Activo es lo que crea valor, El Pasivo es lo que tienes que pagar, formado por deudas.
(Hablando, sintetizando al máximo). No hay que confundir con los llamados ingresos pasivos.
Ahora, si la casa la has comprado para venderla o alquilarla a un tercero, entonces es un Activo, porque recoges dinero, entra dinero en tu mesa.
Obviamente si es para vivir en ella, es un Pasivo: tienes calidad de vida, pero no ganas con ella.
Y así Padre pobre, Padre rico continúa hablando de muchas cosas, como el de no endeudarnos.
El peligro de las tarjetas de crédito
Como el no abusar de la tarjeta de crédito, el llamado dinero de plástico, que puedes estar pagando a un interés nominal de un 18% y en cambio un interés real de un 45%.
Compré el libro Padre pobre, Padre rico hace más de diez años, de casualidad leyendo la prensa escrita.
Entonces me fue difícil conseguirlo, porque el anuncio era de un periódico nacional, recorrí varias librerías.
Si deseas adquirirlo, aquí tienes un enlace Padre Rico, Padre Pobre
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En esta actualización aparte del libro Padre Rico padre pobre y libros relacionados del autor, he incluido dos libros de otros autores que también considero muy interesantes.
Siguiendo con la conclusión de quién lleva razón, de quien invierte o no invierte, de quien tiene un puesto seguro o no tropezaríamos con otra duda metódica:
La lucha antagónica de quién come mejor, el que come carne o el vegetariano.
Así que hay que no esta de mal de seguir estas ideas y los consejos de Padre pobre, Padre rico .
Por otro lado ahora voy a hablar de las diferencias entre rico y próspero.
Ideas principales sobre los conceptos de rico y próspero
Por otro lado, una conclusión te lleva a otra y te planteas las diferencias que hay entre ser rico y ser próspero.
La verdad, la pintan calva (con respeto a los mismos).
Muchas veces confundimos los dos términos pero no son lo mismo.
Hemos oído decir:
La felicidad no es tener más, sino estar a gusto con lo que se tiene.
La riqueza, puede venir de una herencia, de un premio de lotería, o de haber amasado una fortuna.
Prosperidad y Riqueza: Padre Rico Padre Pobre
La prosperidad es la capacidad de ir generando recursos continuamente.
La riqueza por lo tanto es efímera, o sea corta en el tiempo, salvo que se sepa mantener.
Si se hunde el sistema financiero o el inmobiliario ¿Quién gana?
En cambio la prosperidad es a medio-largo plazo. Es el saber mantenerse e ir generando recursos, porque estos son limitados.
Es una difícil tesitura.
Y para hasta ahora, nuestra mente consumista muy difícil de comprender.
Volviendo al tema del libro de Kiyosaki, Padre rico padre pobre, te planteas muchas cuestiones. Cuestiones que generan polémica en las conversaciones.
Entre esas conversaciones existían objeciones como que el libro estaba hecho para gente muy rica que puede mover los capitales a su antojo y no teme perder algún que otro bien, una casa, un coche de lujo, por ejemplo o no tiene miedo a perder dinero.
Padre Rico Padre Pobre comprar
Si deseas leer el libro pulsa sobre la imagen. He elegido la versión para jóvenes, de esa forma aún tienes tiempo de formar el tallo si vas a emprender algún tipo de negocio. Espero que te guste.
Conclusiones
Ante todo depende de cada uno, mira mi entrada sobre el diezmo.
Decían que no estaba muy cuerdo. Que toda la vida hay que trabajar. Sin trabajo no tienes dinero, y en parte es cierto.
Robert Kiyosaki, parte entre otras cosas, de que el dinero ha de trabajar para nosotros y no nosotros para el dinero. Si se hubieran aplicado esos principios, mucha gente se hubiera “salvado” de la crisis.
Se han salvado los austeros, los que han ahorrado y han reducido costes, o a nivel personal, se han privado de cosas que con frecuencia empleaban el dinero, más por experiencia que por otra cosa.
Hay un refrán que dice:
Más sabe el diablo por viejo, que por diablo.
***Actualización de 2019, aunque le dejo la fecha original.
Entonces ¿que eliges?
¿Ser Próspero o Ser Rico?
A los lectores también les ha gustado